El mes de abril tiene como protagonistas a los trajes de flamenca. Tan espectaculares como sus diseños son sus cuidados, así que ¡atenta a estos trucos para aprender a conservarlos!
Los trajes de gitana son muy delicados, ya que están compuestos por multitud de pequeños detalles, como borlas y flecos, que se recomienda guardar aparte para no estropearlos de un año al otro.
Tanto si deseas hacerlo antes de ponértelo como si quieres reservar este truco para después de usarlo, a continuación te enseñamos a planchar el traje de flamenca para que saque a relucir todo su brillo y te quede como nuevo (aunque tenga varios años) y sin dañar el tejido. ¡Atenta a los siguientes tips!
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Cómo planchar el traje de flamenca paso a paso
Antes de planchar tu vestido de flamenca, es recomendable lavarlo, descosiendo las enaguas y lavarlas separadamente del resto del vestido. En el blog de Lina te explican muy bien cómo lavar tu traje de flamenca en casa. Son pasos sencillos que debes llevar a cabo con paciencia y cuidado, pero no tienen mayor dificultad. A la hora de plancharlo, sin embargo, deberás asegurarte de seguir estos pasos:
1. Planchar el traje de flamenca del revés
Dale la vuelta a tu vestido de gitana para darle un primer planchado que estire bien la tela y elimine las arrugas generales que el roce con tu cuerpo y el bailoteo hayan podido provocar en el traje -¡Esperamos que sean muchas!-.
Coloca el vestido vuelto en posición horizontal, sobre la tabla de planchar, y desliza la plancha a temperatura media y a lo largo de toda la tela.
2. Plancha el vestido volante a volante
Así es. Con sumo cuidado, gira otra vez el vestido y coloca el extremo de la falda en la punta de la tabla de planchar, como si quisieras vestir a la tabla con ella. Para que el resto del vestido no caiga al suelo, coloca un taburete o una mesita alta junto a ti, y apoya el resto del vestido sobre este soporte. Puedes poner sobre el taburete o la mesa, un cesto, para que el vestido se arrugue lo menos posible.
Si la tela no es muy fina, usa la plancha con una temperatura más alta y mucho vapor. Así podrás planchar cada uno de los volantes por separado y dejarlos bien tiesos sin dañarlos. Puedes poner poner entre la plancha y el vestido un trozo de tela o papel, para que el procedimiento sea todavía más delicado.
En el caso de que la tela de tu traje de flamenca sea muy fina, puedes planchar los volantes a temperatura media, como antes.
Plancha los volantes uno por uno y alrededor de todo el vestido para asegurarte de que el traje entero queda perfecto, hasta llegar al cuerpo.
3. Plancha el cuerpo del vestido de flamenca sin adornos
Por si no lo has hecho ya, descose y aparta los complementos que adornen tu traje de flamenca. A continuación, guárdalos en una caja para lavarlos a mano (si se puede) o sencillamente pasarles un paño húmedo. Algo que se recomienda hacer también con los pendientes, flores y demás complementos.
Plancha el cuerpo de arriba a abajo con la temperatura media o alta (usando un papel), dependiendo del grosor del tejido de tu vestido de flamenca.
Cómo planchar un mantón de flamenca
No sólo hay que planchar el traje de flamenca, también el mantoncillo. La dificultad de los mantones son los flecos que los decoran. Se enredan por mucho cuidado que tengas y contra eso nuestra arma va a ser el vapor.
Plancha la tela de tu mantón -al revés si tiene mucho bordado- y hazlo de forma paralela a los flecos.
Cuando termines, plancha los flecos a temperatura alta y con mucho vapor, partiendo de la raíz del fleco hacia afuera. Y así, ves repasando las veces que haga falta hasta conseguir desenredarlos y dejarlos bien lisos.
Estos son nuestros trucos para planchar el traje de flamenca. Seguro que tú también tienes alguno, ¡Cuéntanos y a disfrutar de la feria!
