Se acerca el final de curso, una de las temporadas de más estrés para los estudiantes, pero también para los padres, preocupados por el rendimiento de sus hijos. ¿Quieres saber cómo ayudarlos y que saquen las mejores notas posibles? Aquí tienes cinco consejos que te pueden ayudar a conseguir mejores resultados.
En ocasiones puede resultar frustrante para los padres ver que sus hijos están sacando malas notas o no están aprovechando todo su potencial y no saben muy bien qué hacer para solucionar este problema. Todavía hay tiempo para cambiar la actitud y conseguir que las notas de final de curso sean mejores que las anteriores.
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Motivación
Los padres no son los únicos que se pueden sentir frustrados con el resultado de las notas, también los niños pueden tener ese problema. Regañarles o echarles la bronca no es la solución, todo lo contrario, va a empeorar su autoestima y su predisposición para estudiar.
Una buena motivación empieza por destacar sus puntos positivos y reforzarlos, centrarle sólo en las cosas malas sólo ayuda a desmotivarle. Las debilidades del niño son las que tenéis que trabajar juntos. Por ejemplo, si tiene problemas de concentración, ayudadle a conseguir un ambiente de trabajo más tranquilo para que pueda concentrarse mejor.
Concentración
El problema de la concentración es cada vez más habitual entre las nuevas generaciones. Hoy en día tienen muchas distracciones cerca, como puede ser el móvil sonando todo el tiempo con whatsapps o el ordenador. Lo mejor es delimitar un tiempo de estudio en el que estas cosas se dejan fuera para conseguir una mejor concentración.
También es importante que tenga su propio lugar de trabajo, que esté limpio y ordenador y que siempre sea el mismo. Así se consigue crear un hábito de estudio que hará progresivamente más fácil que se ponga a estudiar.
Hablar con el tutor
Durante las horas que está en clase, no sabes nada de lo que está haciendo o no tu hijo. Lo más recomendable es hablar con su tutor y saber su opinión. Él sabe mejor que nadie dónde están los problemas del alumno.
Quizás el problema de tu hijo no sea una falta de estudio, sino que no suele prestar atención en clase y eso hace que se pierda muchas de las explicaciones que se da. Este tipo de cosas sólo las sabe el tutor, por eso es una parte importante para que su rendimiento mejore.
Técnicas de estudio
Cada persona es un mundo y hay ciertas cosas que a algunos les funciona mejor y a otros peor, por eso hay que buscar qué es lo que le va bien a tu hijo para estudiar. Hay técnicas de estudio muy variadas, como puede ser hacer esquemas o resúmenes de los temas. Pregunta en el centro por ellas y aplícalas
Con estos consejos verás cómo tu hijo aprovecha mucho mejor el tiempo que pasa estudiando y esto, al fin y al cabo, repercutirá en las notas a final de curso. Recuerda que lo importante es apoyarle y ayudarle para que consiga sacar lo mejor de sí y utilizar todo su potencial.
