Contratar a un empleado del hogar es una cuestión que hay que meditar ya que hay varias opciones a tener en cuenta. Si lo haces directamente, te ahorras un intermediario, aunque tienes que hacerte cargo de los trámites burocráticos que pueden ser engorrosos, mientras que una empresa especializada te dará un mayor respaldo y seguridad. ¿Qué es lo mejor para ti un servicio interno o externo?
Quizás te hayas planteado contratar a algún profesional para la limpieza de tu hogar, bien porque necesites ayuda o porque quieras dedicar el poco tiempo libre que tienes a otras cuestiones. En estos casos, lo primero que te cuestionas es si contratar a alguien por tu cuenta o hacerlo con una empresa dedicada específicamente a ofrecer este tipo de servicios. Cada opción tiene sus pros y sus contras, te los contamos todos a continuación.
[lwptoc]
¿Buscar a alguien por tu cuenta?
Contratar a alguien por tu cuenta es probablemente lo más fácil si conoces a alguien de confianza con la que puedas contar. También alguna amiga puede recomendarte una persona que estuvo en su casa limpiando y le gustaba cómo lo hacía. De esta forma, el proceso es mucho más rápido y sencillo, sin duda, pero tiene algunos inconvenientes.
Tener a un empleado del hogar en tu casa necesita obligatoriamente que esta persona esté dada de alta en la Seguridad Social, ya que este tipo de trabajos está incluido dentro del Sistema Especial de Empleados del Hogar. Por lo tanto, hay que acercarse a la Tesorería General donde entregar la documentación necesaria y rellenar una serie de impresos.
La sencillez de la que hablábamos al principio del proceso contrarresta con el resto de los trámites por los que hay que pasar, y en ocasiones mucha gente se pierde en este tipo de gestiones y le puede costar más de un dolor de cabeza.
¿Contratar a una empresa especializada?
Este problema que nos encontramos al contratar a alguien por tu cuenta se solucionan acudiendo a una empresa especializada de limpieza, la cual es responsable de realizar todos estos trámites. Así, el cliente no tiene que preocuparse de nada.
Además, una empresa de limpieza tiene experiencia realizando este tipo de trabajo y ha recibido el feedback que le ha ido llegando de sus clientes. También se llevan a cabo entrenamientos para ofrecer un servicio lo más profesional posible y que el resultado final sea del gusto del cliente.
Una buena forma de saber a ciencia cierta que una empresa hace un buen trabajo son los sellos de calidad de las normas ISO. Esta organización se encarga de certificar el buen desempeño de una empresa a través de una serie de reglas y se ha convertido en un estándar de calidad entre compañías de cualquier sector o industria.
En definitiva, contratar a alguien de confianza directamente puede ser una buena opción, probablemente la más barata, pero tienes que hacerte cargo de todos los trámites burocráticos con la Seguridad Social y gestionar las vacaciones y las posibles bajas.
Por el contrario, contratar a una empresa especializada de limpieza puede subir ligeramente el precio, pero te encuentras más cubierto gracias a que hay una corporación detrás que lleva a cabo todas las gestiones, dispone de un seguro de responsabilidad civil y te garantiza un nivel de satisfacción que, si no lo alcanzas, podrás reclamar al supervisor para que se realicen los cambios necesarios.
